¿Cuántas ruedas de
prensa sufren los periodistas al mes? ¿cuántos portavoces aburren a la
concurrencia mediática? ¿qué cantidad de mensajes clave se
quedaron en el tintero? Y lo que es peor, ¿cuántos periodistas ya ni siquiera acuden a ellas?
Se puede ser
eficaz y entretenido, en materia de presentaciones a medios. Lo vi en el
lanzamiento de DSIGNO, la primera
iniciativa de formación universitaria cien por cien on line en Diseño (moda,
interiores y gráfico).
Tres entrevistas de un golpe
Eligieron como
conductora del acto a Laura Opazo, conocida por presentar un canal temático (DeCasa.tv),
bloguera y , desde luego, muy experimentada en comunicación. Es decir, sabía de
diseño, de moda y de comunicación, además de ser conocida (y guapa).
Ella guió el acto. Le dio comienzo, saludó y centró a los asistentes en los principales propósitos (mensajes) de la convocatoria.
Dió también paso a los protagonistas dela información. Pero
no a la manera de un moderador de
mesa. Planteó con brío al primer interviniente cuestiones muy concretas. Más tarde , al
segundo. Ambos eran los representantes de las entidades promotoras de DSIGNO.
En la mesa
se encontraba también un tercer
interviniente, un enólogo y empresario vitivinícola. ¿Qué hacía este señor aquí?
La presentadora lo justificó: el diseño
es parte nuclear del éxito de su bodega. Le preguntó por las aplicaciones del
diseño, por los profesionales a los que confiaba esa parte, por los efectos en
su empresa. Es decir, resultó ser un caso práctico en vivo. Porque este
empresario al recibir atención y tiempo, contribuyó a realzar ante la prensa el valor
de una buena formación en diseño, uno de los mensajes clave según principal de la rueda de prensa.
La presentadora se dirigió hizo participar también a los asistentes, entre ellos algunos jóvenes empresarios, antiguos ex-alumnos.
Les preguntó en qué medida los conocimientos y enfoques de la formación les
habían encaminado a montar una empresa propia, el balance, las dificultades ….
El único video que se proyectó duró solo 59 segundos . No hubo power
point, salvo para informar sobre los nombres y cargos de la mesa.
Es un formato breve y, sin
embargo, consiguió los objetivos que ruedas de prensa más costosas y
complicadas no logran.
En síntesis:
- Trabajo previo de guionización
y reparto de mensajes entre los ponentes . A mayor preparación del guión, mejores efectos de la comunicación: Pulir las ideas, la manera de decir y que se
entiendan y ,finalmente, ensayar las
actuaciones. El equipo de comunicación
prepara a conciencia las ideas, y los directivos se aprenden sus respuestas y
las ensayan.
- ¡Celebrities, dejen paso a
otros!. Ser famoso no garantiza los objetivos con los Medios. Vale más un profesional no tan conocido que infunde confianza y reduce el efecto de espectáculo, porque sabe preguntar, porque sabe obviar lo que no es pertinente y porque inspira
a los intervinientes . Consigue
agilidad, abreviar los tiempos y que los
medios se lleven puesto los
principales mensajes.
-
En una rueda de prensa o presentación a medios se comparten
los mensajes entre los intervinientes.
No hay convidados de piedra por
cuestión de protocolo y el evento
gana en agilidad y resulta hasta creíble.
Sencillo pero no improvisado. Eso seguro
